TOTALITARISMO O DEMOCRACIA EN VENEZUELA


El próximo domingo, 15 de Febrero de 2009, se celebrará un hecho trascendental en la historia republicana como lo es el referendo que permitirá aprobar o rechazar el proyecto de Enmienda Constitucional que procura instaurar la reelección continua de los cargos de elección popular, entre ellos el del Presidente de la República.
El resultado de este acto electoral determinará si este país entra definitivamente en un régimen totalitario, y por vía de consecuencia la conculcación del régimen de libertades, o reafirmamos, preservamos y luchamos por rescatar, mantener y vivir en democracia.
Este proceso se ha venido desarrollado dentro de un clima de violencia, estimulado por el Ejecutivo Nacional, donde varios sectores se han visto afectados, bien por agresiones verbales de funcionarios públicos, por conductas represivas provenientes de los cuerpos de seguridad del Estado o acciones violentas de grupos paramilitares. Recintos religiosos como la Sinagoga de Maripérez, la Catedral de Caracas y la Iglesia de San José en Chacao, así como la Nunciatura Apostólica, dirigentes y partidos políticos, directivos y medios de comunicación social, estudiantes y periodistas, han sido blanco de estas actuaciones, lo cual constituye terrorismo de estado y no tiene otro propósito que el de inhibir o atemorizar a la población.
De acuerdo a reportes emitidos por el CNP y el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP), en los últimos cuatro meses se han producido 55 agresiones a periodistas y medios de comunicación social, destacando en el último año, las proferidas contra Globovisión, Radio Caracas Televisión, diarios El Nacional, El Nuevo País, semanario La Verdad de Maracaibo, el homicidio del periodista Orel Zambrano, los ataques a las periodistas Martha Colomina, Cecilia Rodríguez, Charito Rojas y el reportero gráfico Orlando Alviarez; las amenazas a Rafael Poleo, Miguel Enrique Otero y Marcel Granier, los atentados a la casa de habitación de este último, el cierre de la fuentes informativas, amen de los periodistas que se encuentran en el exilio, entre ellos Patricia Poleo y Salvador Romaní, entre otras.
En medio de este ambiente se celebró el 21-01-2009 una Asamblea Extraordinaria de Periodistas donde no solo se trataron estos hechos sino lo concerniente a la enmienda constitucional. Durante el desarrollo de este evento manifesté que el gremio debía pronunciarse contra de dicha propuesta ya que no solo viola el principio de la alternabilidad, previsto en el Art. 6 de la Carta Magna, sino que con ella se pretende la reelección indefinida del Presidente Hugo Chávez Frías, lo cual constituye un grave riesgo ya que la permanencia de un mismo hombre en el poder trae como consecuencia la destrucción de la institucionalidad republicana, la violación de derechos fundamentales y la dictadura.
En dicha Asamblea se produjeron intervenciones de colegas que consideraron que, ante el proceso refrendario en curso, el Colegio Nacional de Periodistas debía asumir una posición institucional, de neutralidad o simplemente no emitir ningún tipo pronunciamiento, bajo el argumento de que no se debían asumir posturas políticas, lo cual me llevó a la reflexión no solo por la trascendencia del evento electoral y las consecuencias que ello puede generar sino porque el gremio periodístico siempre ha estado a la vanguardia de las luchas democráticas, como ocurrió durante la dictadura de Marcos Pérez Jiménez o cuando se enfrentó abiertamente a los gobiernos democráticos ante actuaciones que consideraban violatorias de derechos inherentes a la condición humana, destacando la posición asumida por Ana Luisa Llovera, presidenta de la Asociación Venezolana de Periodistas (AVP), organización que antecedió al CNP, y quien, a pesar de su militancia adeca se enfrentó a sus compañeros de partido, en funciones de poder , en defensa de la libertad de expresión. De igual modo recuerdo el movimiento de periodistas que se constituyó en defensa de los derechos fundamentales de los militares insurgentes, encabezados por el hoy presidente de la República, Tte. Cnel. Hugo Chávez Frías.
Si en el pasado el gremio tuvo una actitud combativa, en las actuales circunstancias, cuando esta en juego nuestro futuro y el de nuestros hijos, cuando el objetivo de la enmienda es la personalización del poder, debemos rescatar el espíritu de Ana Luisa Llovera y asumir posiciones enérgicas contra acciones que tiendan a la destrucción del régimen de libertades.
No se trata de asumir posturas político-partidistas sino la defensa de un bien mayor: La Democracia y los principios y valores que de ella se desprenden: La vida, la libertad, la justicia y la igualdad.
El abuso de poder, el terrorismo de estado, la concentración del poder en una sola persona, la represión, la utilización de la justicia para criminalizar la disidencia, las inhabilitaciones políticas, las presiones para que en medios y periodistas se produzca autocensura y la existencia de presos políticos, evidencian que el actual régimen se ha apartado de los cánones democráticos y se encamina hacia el totalitarismo de Estado; sistema de gobierno donde algunas de las libertades que se ven mas afectadas son la libertad de expresión e información, ya que uno de sus objetivos es silenciar a la prensa para ocultar la verdad, distorsionar la realidad mediante la mentira, el engaño, la desinformación y con ello manipular a la población, controlar la psiquis del ciudadano, anular las formas de pensamiento y la utilización de los medios de comunicación social como forma de adoctrinamiento, con lo cual procura convertir a los ciudadanos en verdaderos zombies, en seres sin alma, garantizando con ello la perpetuación del líder en el poder.
Ante esta circunstancia no se puede permanecer indiferente o tomar posiciones neutrales. Se deben superar los miedos. Este es uno de los momentos en que todos los ciudadanos, instituciones y gremios, debemos fijar posición y ejecutar acciones en defensa del régimen de libertades. Cada uno de los venezolanos debe defender lo que tanto nos ha costado: Una República libre e independiente, que tiene como fin el desarrollo de la persona y el respeto a su dignidad; el ejercicio democrático de la voluntad popular, cuya soberanía reside en el pueblo; con un gobierno que es y será siempre democrático, participativo, electivo, descentralizado, alternativo, responsable, pluralista y de mandato revocable, principios estos contenidos en el Título I de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela. Por tal motivo, debemos decirle NO a la Enmienda Constitucional y salir a votar el próximo domingo 15 de Febrero.

Caracas, 11 de Febrero de 2009



Andrés Eloy Arrioja Vasquez
C.I. 2.776.355
CNP Nro. 207

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